Menu

Proyecto Visión 21

Cuando la realidad virtual supera a la realidad real, poco queda de la realidad

Recientes reportes científicos resultan interesantes y a la vez verdaderamente alarmantes porque, aunque parecen extraídos de una película de ciencia ficción, se trata de situaciones reales que desdibujan los límites entre lo real y la ilusión o la fantasía.

Por ejemplo, la exitosísima inteligencia artificial conocida como ChatGPT aprobó hace pocos días el examen de ingreso a la Facultad de Economía Wharton de la Universidad de Pennsylvania. Aunque ChatGPT no obtuvo las mejores calificaciones (respondió acertadamente un 80 % de las preguntas), proveyó “excelentes explicaciones” para sus respuestas.

A la vez, en otro experimento, ChatGPT respondió suficientes preguntas correctas como para aprobar el Examen Multiestatal de Abogacía, un examen basado en múltiples opciones de repuestas que los graduados de abogacía deben pasar antes de comenzar oficialmente a practicar esa carrera. 

Y como si eso fuera poco, ChatGPT también aprobó (aunque con calificaciones mínimas) las tres partes del examen de licenciatura médica de Estados Unidos gracias a que demostró “altos niveles de consistencia e ideas creativas en sus explicaciones”. 

Hace algún tiempo, un perfil creado en LinkedIn usando sólo imágenes y textos generados por inteligencia artificial resultó tan atractivo que (sin saber que “Katie Jones” era una inteligencia artificial y no de una persona real) funcionarios del gobierno de Estados Unidos y personas con alto nivel de influencia empresarial y social se conectaron con ese perfil.

“Katie Jones” se hizo pasar como representante de un grupo de expertos en Washington DC, por lo que logró conectarse con un funcionario de la Secretaría de Estado de Estados Unidos, con la oficina de un influyente senador y con un reconocido economista. 

Cabe mencionar que desde aquel incidente la capacidad creativa de la inteligencia artificial ha progresado tanto que en la actualidad “las fotos creadas por IA son más reales que las imágenes genuinas”, advirtió en un reciente artículo (23 de enero de 2023) el Dr. Manos Tsakiris, Profesor de Psicología y Director del Centro de Política de Sentimientos en la Universidad Royal Holloway de Londres.

Y existen más ejemplos. El pasado 25 de enero, el congresista Jake Auchincloss (demócrata de Massachussets) dio un discurso sobre legislación bipartidista escrito totalmente por inteligencia artificial. 

Por su parte, el Rabino Joshua Franklin, del Jewish Center of the Hamptons (Nueva York) dio hace pocas semanas un sermón completo, creado por ChatGPT, sobre la historia de José en Egipto. El sermón fue muy bien recibido y si Franklin no hubiese revelado que él no era el autor del sermón, su congregación nunca no lo hubiese sabido. 

¿Qué significa entonces esta nueva situación para nosotros? Según el Dr. Tsakiris, “La transición a un mundo donde lo que es real es indistinguible de lo que no lo es podría cambiar el panorama cultural de ser primariamente auténtico a ser algo principalmente artificial y engañoso.”

Desde otra perspectiva, el filósofo Markus Gabriel afirma que “No nos evadimos de la realidad por engañarnos o ser engañados con respecto a ella, pues lo real es aquello de lo cual no logramos tomar distancia”.

Go Back

Comment

Blog Search

Blog Archive

Comments

There are currently no blog comments.